Buenas, como todos los sábados, les pedimos un minuto de su amable atención para compartirles algunas de las cosas que estuvimos consumiendo esta semana. Al final del camino pasamos la gorra vía Mercado Pago o PayPal. Gracias.
Como decíamos la semana pasada, pasaron las copas continentales más importantes, dando por terminada la temporada 2023-2024 y a los pocos días arrancó la siguiente. Picó en punta el descalabrado fútbol argentino, con su selección de luxe y su torneo local de segunda marca. El torneo fue interrumpido para las competencias internacionales y retoma como si nada esta semana. Ya perdió feo Independiente, arrancando un nuevo ciclo, que pinta como los anteriores. Otro club con una historia impresionante, arruinado por una dirigencia impresentable (¡los Moyano!) en el marco de una economía en declive.
Recordemos que estaban punteros con 13 puntos Talleres de Córdoba, el más prometedor de los equipos, aparentemente no desarmado, junto a Unión y a Huracán. Se les sumó, al menos momentáneamente, Instituto, luego del mencionado triunfo contra Independiente. Talleres juega el domingo a las 20, visitante de Vélez, lindo partido para ver. Unión visita a Estudiantes el domingo a las 17.15.
Huracán, el otro puntero, juega el partido más importante del sábado, el clásico legendario contra San Lorenzo, en el Nuevo Gasómetro, a partir de las tres de la tarde. Pronosticamos un empate en 1 ó en 0, con un expulsado de cada lado, partido muy trabado.
River juega el domingo a las 15, local de Lanús. Veremos en qué mood se presenta el imprevisible equipo de Demichelis. Boca, que tiene sus kilombos, juega el domingo a la 20, visitante del siempre difícil Defensa y Justicia.
Después hay fecha entre semana, o sea que volvimos con todo.
Oblígame (Lee Child, Blatt y Ríos)
Leí mi segunda novela de Lee Child con el personaje Jack Reacher. Como la primera vez (no me acuerdo el título) me resultó atrapante. No ví las adaptaciones en serie o películas, me gusta que sea la literatura la que me devele ese mundo absurdo en donde un ex militar, enorme, con la inteligencia de Sherlock Holmes y la fuerza de Hulk, vagabundee por el mundo sin equipaje y se mete una y otra vez en kilombos. En este caso, se trata de bucear, de manera virtual y real, por las profundidades de la deep web, que esconden los secretos más macabros imaginables.
Las novelas de Reacher son increíblemente placenteras y han roto la distinción entre cultura alta y baja. Las edita en Argentina una editorial independiente de prestigio, como Blatt y Ríos, y las devora sin complejos nuestro amigo Quintín (leer acá que, si bien se refiere a otra novela, hace una fina disección del personaje).
Federer: los últimos doce días (Amazon Prime)
Es un documental de registro íntimo de los últimos doce días de la carrera del más elegante, más querido y probablemente mejor tenista de la historia, el suizo Roger Federer. Luego de una serie de operaciones en sus rodillas, Roger decide abandonar la práctica activa del tenis y resuelve que se despedirá en la Copa Rod Laver, jugando para el team Europa, acompañado de su archirrival y amigo Rafael Nadal y acompañado de estrellas como Novak Djokovic, Andy Murray y otros.
Es muy impresionante ver a la realeza del deporte confraternizando amablemente, jugando un poco de tenis y conmoviéndose hasta las lágrimas cuando cada punto del último partido de dobles (Rafa-Roger, como pareja) se convierte en la recta final de una carrera memorable. Al final llora Roger, llora su mujer Mirka, sus hijos e hijas concebidos de a pares, pero también llora desconsoladamente Rafael Nadal, llora Djokovic, que se supone es el villano de la historia y de quien nadie sospecha que tenga sentimientos, llora el público y llora el espectador, pensando que hasta los más grandes deportistas sucumben ante el rival más peligroso e imbatible, el tiempo.
Hay que ver esta película, sencilla, sin ambiciones especiales pero que guarda en sus imágenes momentos extraordinarios. Hay que verla porque todo lo que se relacione con Federer se jerarquiza, pero también porque nos tenemos que empezar a preparar para el momento de la despedida de nuestro gigante, el que está a la misma altura de Federer, en calidad deportiva y humana, el GOAT, nuestro Lionel Andrés Messi Cuccittini. Hay que empezar a prepararse para ese momento terrible. No sé si voy a poder soportarlo.
Them, primera temporada (Amazon Prime)
Apareció la segunda temporada de Them, una serie de terror “afroamericana”. No la vi, no veo segundas temporadas, aunque en este caso se trata de historias no relacionadas, como las True Detective, así que por ahí le doy una chance. Lo cierto es que es una buena oportunidad para recomendar la primera temporada, de 2021, que vi en su momento y me gustó mucho.
La serie consta de diez capítulos de aproximadamente una hora, está muy bien filmada y combina en su generación de angustia y miedo, los horrores del racismo con los elementos clásicos del terror fantástico. El centro es una pareja negra con dos hijos que se muda en 1953 de Carolina del Norte a un barrio blanco de Los Angeles, donde no son especialmente bien recibidos. El contexto no explicitado en la serie es la “Second Great Migration”, donde cinco millones de afroamericanos se trasladaron del Sur de los Estados Unidos hacia el Oeste y el Norte. Comenzó en 1940 y terminó en el comienzo de la década del 70. En general eran trabajadores urbanos, con cierta calificación que buscaban empleos en ciudades grandes y desarrolladas, a diferencia de la Primera Migración, sucedió entre 1916 y 1940, en donde se trataba de trabajadores rurales que no alcanzaron la costa Oeste.
Toda esta sociología demográfica está en la serie, pero no de manera discursiva, sino inmersa en la propia trama. La familia Emory trata de integrarse al barrio blanco y de insertarse laboralmente pero el racismo de la gente del lugar les hace la vida imposible. Además, como si fuera poco, aparecen espíritus de épocas aún peores, de cuando la esclavitud era legal, que vienen a poner más maldad en el ambiente. La serie es elegante, filmada estilizadamente y con grandes actuaciones, especialmente de Alison Pill, más blanca y rubia que nunca, componiendo una villana aterradora.
One Hand Clapping (Paul McCartney)
Apareció en las plataformas esta joya de Paul McCartney que tiene su historia particular. Paul, en 1974 quiso de alguna manera retomar el proyecto de Let It Be, de filmar el backstage de la grabación de un disco (reflejado de manera extraordinaria por Peter Jackson en Get Back) pero ahora en el ámbito menos conflictivo de su grupo Wings, incluyendo a Linda Eastman, su esposa. La película nunca se estrenó y recién apareció en 2010, como parte de una caja de CDs que celebraban el aniversario del disco Band on the Run, el más exitoso de la era Wings.
En One Hand Clapping aparecen varias de sus canciones de esa época solista, tocadas en vivo en el estudio, sin postproducción, como saliera. También hay versiones de la época Beatle (una pequeña versión con órgano de Iglesia de “Let It Be”, “The Long and Winding Road” al piano que se convierte en “Lady Madonna”) y algunos caprichos encantadores como una versión de “Blue Moon of Kentucky” impecablemente country. Misteriosamente no aparece ninguna canción del disco Ram, el mejor disco pop de la historia.
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